Amado Tabernáculo Branham:

Cuán bendecidos son nuestros ojos, porque ven. Cuán bendecidos son nuestros oídos, porque oyen. Profetas y hombres justos desearon ver y oír las cosas que nosotros hemos visto y oído, pero no lo vieron. Nosotros hemos VISTO Y OÍDO LA VOZ DE DIOS.

Dios Mismo escogió escribir Su Biblia por medio de Sus profetas. Dios Mismo también eligió revelar todos Sus secretos a Su Novia en este tiempo del fin a través de Su profeta. Son Sus atributos, Su Palabra expresada, haciéndolo todo una parte de Él.

Cuando nuestra edad llegó, Él hizo que Su profeta llegara al mismo tiempo. Él lo inspiró y habló a través de él. Fue Su manera predestinada y provista para hacerlo. Como la Biblia, Es la Palabra de Dios, y no la palabra del hombre.

Nosotros debemos tener un Absoluto, lo definitivo; la Palabra final. Algunos hombres dicen que la Biblia es su Absoluto, no lo que dice en las cintas; como si ellas dijeran algo diferente. Es tan maravilloso como Dios ha escondido la verdadera Revelación de Su Palabra de tantos, pero La ha revelado y hecho tan clara a Su Novia. Otros simplemente no pueden evitarlo, están cegados y no tienen la Revelación completa de la Palabra de Dios revelada.

Dios habló en Su Palabra (la Biblia) a través de Su profeta y nos dijo: “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas”. Por lo tanto, los profetas de Dios escribieron la Biblia. No fueron ellos, sino Dios hablando a través de ellos.

Él dijo que en nuestro día Él nos enviaría Su Espíritu de verdad para guiarnos a todas las verdades. Él no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y nos hará saber las cosas que habrán de venir.

El Mensaje en las cintas son las verdades de Dios reveladas. No necesita ninguna interpretación. Es Dios Mismo interpretando Su Palabra mientras Él La habla en las cintas.

No hay continuidad en lo que otros hombres hablan, solo en lo que Dios habla. Lo que se dice en las cintas es la única Voz que NUNCA CAMBIARÁ. Los hombres cambian, las ideas cambian, las interpretaciones cambian; la Palabra de Dios nunca cambia. Es el Absoluto de la Novia.

El profeta nos da el ejemplo de un árbitro que es un absoluto en un juego de pelota. Su palabra es lo definitivo, no se puede cuestionar. Lo que él dice, eso es todo, punto. Ahora, el árbitro tiene un libro de reglas que debe seguir, le dice dónde están las zonas para una bola o un strike, cuándo está Ud. seguro y cuándo está fuera; cuáles son las reglas para un juego de pelota.

Él lee y estudia ese libro, así que cuando habla y toma su decisión, esa es la ley, esa es la última palabra. Usted debe permanecer con lo que él dice, ninguna pregunta, ningún argumento, lo que sea que él dice, esa es la manera que tiene que ser y no puede ser cambiado. Gloria.

El Hermano Branham no dijo que Ud. no debía predicar, o enseñar; al contrario, dijo que predicaran, y que escucharan a sus pastores, pero la Voz de Dios en las cintas tiene que ser su Absoluto.

Tiene que haber un poste de amarre, en otras palabras, lo definitivo. Todos deben tener eso definitivo, es la última palabra. Dios ha provisto un solo lugar para obtenerlo, la Voz de Dios en las cintas. Es la interpretación divina de la Palabra de Dios, es la PALABRA FINAL, EL AMÉN, EL ASI DICE EL SEÑOR.

Jesús Mismo dijo que nosotros los llamamos: “dioses”, a aquellos que hablaron Su Palabra; y ellos eran dioses. Él dijo que cuando los profetas fueron ungidos con el Espíritu de Dios, trajeron exactamente la Palabra de Dios. Era la Palabra de Dios hablando a través de ellos.

Por eso nuestro profeta fue tan osado, él fue movido por el Espíritu Santo para hablar la Palabra infalible de Dios. Dios lo había escogido para nuestra edad, Él escogió el Mensaje que él hablaría, aun la naturaleza de nuestro profeta y lo que sucedería en nuestra edad.

Las palabras que él habló, la manera en que él actuó, cegando a unos, pero abriendo nuestros ojos. Él aun lo vistió con el tipo de ropa que llevaba. Su naturaleza, su ambición, todo exactamente de la manera que él tenía que ser. Él fue perfectamente escogido para nosotros, la Novia de Dios.

Es por eso, que cuando NOS REUNIMOS, es la Voz que queremos poner PRIMERO para escuchar. Creemos que estamos escuchando la Palabra Pura hablada del mensajero elegido y escogido de Dios.

Sabemos que otros no pueden ver ni entender eso, pero él dijo que estaba hablando solo a su congregación. Él no era responsable de lo que Dios daba a otros para pastorear; él solo era responsable del tipo de Alimento con el que él nos alimenta.

Por eso decimos que somos el Tabernáculo Branham, porque él dijo que el Mensaje era solo para su gente en el Tabernáculo, el pequeño rebaño que quería obtener y escuchar las cintas. Él hablaba a los que Dios le había dado para guiar.

Él dijo: “Si la gente quiere hibridar el alimento y cosas allá afuera, obtengan la revelación de Dios y hagan lo que Dios les diga que hagan. Yo haré lo mismo. Pero estos Mensajes, en las cintas, son solo para esta iglesia”.

Realmente Él lo ha hecho muy sencillo para que Su Novia vea y escuche la Voz de Dios y siga Sus instrucciones.

Si Ud. desea unirse con nosotros para escuchar esa Voz, estaremos escuchando todos al mismo tiempo este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville): Cristo Es Revelado En Su Propia Palabra (65-0822m).

Si no puede unirse con nosotros, le animo a escuchar este Mensaje cuando usted pueda.

El Hermano Joseph Branham

Escrituras para leer antes de escuchar el Mensaje:

Éxodo 4:10-12
Isaías 53:1-5
Jeremías 1:4-9
Malaquías 4:5
San Lucas 17:30
San Juan 1:1 / 1:14 / 7:1-3 / 14:12 / 15:24 / 16:13
Gálatas 1:8
2 Timoteo 3:16-17
Hebreos 1:1-3 / 4:12 / 13:8
2 Pedro 1:20-21
Apocalipsis 1:1-3 / 10:1-7 / 22:18-19