Amados en reposo:
En verdad es este el mejor invierno de nuestras vidas. La venida del Señor está a la mano. Hemos sido sellados por el Espíritu Santo; el sello de aprobación de Dios que nos concede todo por lo que Cristo murió.
Ahora poseemos las arras de nuestra herencia, el Espíritu Santo. Es la seguridad, el pago inicial, de que hemos sido recibidos en Cristo. Estamos descansando en las promesas de Dios, reposando en el calor de Su Sol; Su Palabra vindicada, escuchando Su Voz.
Son las arras de nuestra salvación. No nos preocupa si vamos a llegar Allá o no, ¡VAMOS A LLEGAR! ¿Cómo lo sabemos? ¡Dios lo dijo! Dios lo prometió y tenemos las arras. Ya lo hemos recibido y Cristo nos ha aceptado.
No hay forma de escapar de Aquello…de hecho, ¡estamos allí! Lo único que debemos hacer es esperar; Él está llevando a cabo la obra de Pariente Redentor ahora mismo. Nosotros tenemos las arras de eso ahora mismo. Solo estamos esperando el momento cuando Él regrese por nosotros. Entonces, en un instante, en un abrir y cerrar de ojos, nos marcharemos todos hacia la Cena de las Bodas.
Tan solo imaginar todo lo que nos espera. Nuestra mente no puede asimilarlo todo. Día tras día, Él está revelando más de Su Palabra, confirmando que estas grandes promesas nos pertenecen.
El mundo se está derrumbando; incendios, terremotos y caos por todas partes, pero ellos creen que tienen un nuevo salvador que salvará al mundo y traerá su edad dorada. Nosotros ya recibimos a nuestro Salvador y hemos estado viviendo en nuestra Edad Dorada.
Ahora Él nos está preparando aun para más Revelación, al profundizar en al capítulo 5 del Apocalipsis. Aquí Él está creando la escena para la apertura de los Siete Sellos. Tal como lo hizo en el primer capítulo de Apocalipsis, al abrir el camino para las Siete Edades de la Iglesia.
¿Cómo será el resto del invierno para la Novia? Veamos un pequeño avance:
Ahora, no me queda tiempo. Lo tengo escrito, un contexto de eso aquí, pero en nuestra próxima reunión antes de poder entrar en esto… Tal vez cuando venga de mis vacaciones o en algún otro momento, quiero abordar estas setenta semanas de Daniel y conectarlas aquí, y mostrar dónde lo lleva al Jubileo Pentecostal, y lo trae de nuevo con esas siete plag-… esos siete sellos para abrirse aquí antes de irnos, y mostrar que es al final, estas…
¡Qué momento tan maravilloso tiene el Señor reservado para Su Novia! Revelándose Él Mismo en Su Palabra como nunca antes. Demostrándonos que somos Sus elegidos, por quienes Él viene. Diciéndonos que estamos en Su voluntad perfecta al permanecer con Su Voz y Su Palabra.
¿Qué estamos haciendo? Ni una sola cosa, ¡solo Descansando! ¡Esperando! Sin más labor, sin más confusión, ¡ESTAMOS DESCANSANDO EN ESO!
Acompáñenos en el descanso este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), mientras escuchamos la Voz de Dios VINDICADA impartirnos el Mensaje:
Apocalipsis, Capítulo Cinco, Parte II (61-0618).
El Hermano Joseph Branham