Queridos Elegidos:
Hoy la Novia de Cristo está regocijándose como en ningún otro día en la historia del mundo, pues conforme a la Palabra de Dios, Él nos ha revelado que tenemos Vida Eterna y que no vendremos a juicio, sino que hemos pasado de muerte a Vida, pues Él tomó nuestro juicio por nosotros.
Además, Él nos ha revelado algo mucho más grandioso. Dicen Uds. ¿más GRANDIOSO? Sí, porque no solo tenemos Vida Eterna (pues habrá miles y miles de personas que recibirán Vida Eterna), sino que Él nos ha revelado y anunciado: “Tengo algo muy especial solo para ti. Algo que los demás no tendrán. ¿Por qué? Porque TÚ ERES MI NOVIA ELEGIDA Y PREDESTINADA, así que he preparado un lugar MUY especial SOLO PARA TI Y PARA MÍ".
Ya sea que Ud. duerma, o que no, sea que le suceda a Ud. o que no le suceda; si Ud. es sepultado, o aunque no sea sepultado, ¡Ud. vendrá de todas maneras! Nada puede detenerlo. ¡Ud. estará allí!”.
Estaremos allí y no hay nada que pueda detenernos, ¡nada! Y una vez que estemos allí, edificaremos casas y moraremos en ellas. Plantaremos viñedos y comeremos el fruto de ellos. No plantaremos y otro lo heredará, PLANTAREMOS nuestros propios viñedos, construiremos nuestras propias casas y nos quedaremos en ellas. Pasaremos la Eternidad - juntos y con Él como Su Novia.
Nos estamos preparando para subir a los cielos por el poder de Dios. Estamos en la cima de la pirámide preparándonos para el Rapto. ¿Y cómo sabemos que todo esto es verdad? Por Revelación. Hemos reconocido nuestro día, hemos reconocido a nuestro mensajero y ahora hemos reconocido quiénes somos.
Sin embargo, solo pueden llegar allí si siguen el Camino provisto por Dios. Ese es el Mensaje de la hora hablado por el mensajero provisto por Dios. Es el único camino provisto por Dios para este día.
Con cada nuevo Mensaje, escuchamos que Él nos dice cómo eligió a una Novia que no caería, que se aferraría de esa Palabra sin importar lo que el resto del mundo dijera al respecto. Se aferrarían de esa Palabra, pues están predestinados para permanecer allí, puesto que Ella es parte de esa Palabra. No se avergonzarán, sino que estarán ORGULLOSOS de decir: "Sí, yo PRESIONO ‘PLAY´".
¿Lo captan? Si fallan, regresen de nuevo a esta cinta. No sé cuánto tiempo más estaré con Uds. Recuerden, ésta es la Verdad del ASÍ DICE EL SEÑOR; es la Verdad, es la Escritura.
Tenemos grandes expectativas por lo que Él nos revelará después. Hemos visto cómo nos ha reunido alrededor del mundo en nuestros hogares para escuchar Su Alimento Almacenado. Vemos que Él ha estado revelando cosas que habíamos escuchado muchas, muchas veces, durante años, pero que solo ahora se están manifestando.
Pero ¿qué nos revelará el próximo Mensaje?
Y ahora, si el Señor dispone, quiero hablar, para concluir esta pequeña serie de servicios desde que estoy aquí, el domingo en la mañana, con una cosa muy importante.
…lo que intentaré hacer, si el Espíritu Santo me ayuda, es tomar el Mensaje y el lugar donde ahora Se encuentra, y traerlo de donde comenzó, trayéndolo hasta el tiempo presente.
Él va a contarnos donde comenzó la Palabra y lo traerá hasta este día presente. ¡Qué día para Su Novia!
Dios en Su cuerpo, Cristo; y Cristo en Su Cuerpo, la Novia. ¡Ooh, vaya! ¡Dios manifestado en Cristo!, ¡Cristo manifestado en la Novia! Y así como Dios sacó del cuerpo de Adán, a la mujer, y ella cayó, igualmente Dios ha sacado del Cuerpo de Cristo, de Su carne, Su Cuerpo, lo cual es Su Palabra, y está sacando a una Novia que no caerá por denominación o credo (no, señor); sino que Ella está volviendo con la Palabra de Dios pura, sin adulterar, siendo manifestada. Espero que todo hombre que escuche esta cinta, y toda mujer, entienda eso.
Estamos ansiosos por escuchar a Dios hablar por medio de Su mensajero y decirnos que somos esa Palabra de Dios pura y sin adulterar que se manifiesta al escuchar la cinta.
Reunámonos en torno a nuestros reproductores de cintas alrededor del mundo, mientras nos sentamos juntos en lugares celestiales a la 1:00 p. m. (hora de Jeffersonville) para escuchar la Voz de Dios revelada a nosotros, Cristo es el misterio de Dios revelado (63-0728).
El Hermano Joseph Branham