Cartas archivadas
sábado, 15 de febrero de 2025

Amados que Vigilan y Esperan:

Hay una emoción entre la Novia como nunca antes. Estamos bajo una gran expectativa; estamos para recibir nuestro año de jubileo. La Novia ha esperado tanto tiempo para que este día llegara. El fin de la dispensación Gentil ha llegado y el inicio de la eternidad con nuestro Señor pronto comenzará.

Estamos entendiendo el tiempo en que estamos viviendo al escuchar la Palabra. El tiempo se ha terminado, el tiempo para el Rapto está a la mano, hemos llegado. El Espíritu Santo ha venido y ha revelado a Su Novia todas las cosas grandes, profundas y secretas.

Estamos en desesperación, buscando a Dios; preparándonos. Hemos echado fuera todas las cosas de este mundo; las preocupaciones de esta vida no significan nada para nosotros. Nuestra Fe ha alcanzado mayores alturas como nunca antes. El Espíritu Santo está dando a Su Dama elegida la Fe de rapto, para que Él pueda venir y llevársela.

Estas sesenta y nueve semanas acertaron perfectamente; la salida de los judíos acertó perfectamente; la edad de la iglesia acertó perfectamente. Nosotros estamos en el tiempo del fin, el tiempo del fin, en la edad de la iglesia de Laodicea, al fin de ella. Los mensajeros, las estrellas, todos han predicado su mensaje; todo se ha hecho; andamos sólo con el impulso.

Qué tiempo tan paradójico estamos viviendo, es el tiempo más difícil ya que el enemigo está atacando a todos como nunca antes. Nos está lanzando todo lo que él tiene, él está desesperado, porque sabe que su tiempo se ha terminado.

Pero al mismo tiempo, nunca hemos estado tan felices en nuestras vidas.

• Nunca hemos estado tan cerca del Señor.
• El Espíritu Santo llena cada fibra de nuestro cuerpo.
• Nuestro amor por Su Palabra nunca ha sido mayor.
• Nuestra Revelación de Su Palabra llena nuestra alma.
• Estamos derrotando a todo enemigo con la Palabra.

Y nunca hemos estado tan seguros de quiénes somos:

• PREDESTINADOS
• ELEGIDOS
• ESCOGIDOS
• SIMIENTE REAL
• SU AMADA
• ETERNA, CON VESTIDURAS BLANCAS, SRA. JÉSUS, OIDORA DE CINTAS, ILUMINADA, VIRGEN CASTA, LLENA DEL ESPÍRITU, INVENCIBLE, ADOPTADA, SIN ADULTERACIÓN, LA NOVIA DE LA PALABRA VIRGEN.

¿Qué sigue ahora? La Piedra está llegando. Estamos vigilando, esperando y orando cada minuto de cada día. No importa nada más sino prepararnos para Su venida.

No es: “Esperamos que sí”, LO SABEMOS. Ya no hay más dudas. En un momento, en un abrir y cerrar de ojos todo habrá terminado, y estaremos al otro lado con todos nuestros seres amados y con ÉL en nuestra Cena de la Boda.

Y ESO ES SOLO EL PRINCIPIO... ¡¡Y NO HAY FIN!!

Venga a prepararse para esa Cena de la Boda con nosotros este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), mientras Dios habla a través de Su poderoso ángel, aquel que Él envió para guiar a Su Novia, mientras él dice, y revela, todos los secretos de Dios.

El Hermano Joseph Branham

Message: La Semana Setenta De Daniel (61-0806).

 

 

sábado, 8 de febrero de 2025

Amada Novia Regocijada:

Hemos fijado nuestros rostros hacia el Cielo en oración y súplica para enterarnos del día y la propia hora en que estamos viviendo.

Como nunca antes, estamos sentados juntos en lugares celestiales, de alrededor del mundo, escuchando a Dios hablar y revelarnos Su Palabra a través de Su poderoso ángel mensajero. El ángel mensajero terrenal que el Padre envió a Su Novia en este último día para revelar Su Palabra.

Gabriel es el ángel para el pueblo escogido de Dios, los judíos. Pero para Su Novia Gentil, Melquisedec Mismo vino y habló a través de carne humana en un ángel terrenal llamado William Marrion Branham, para así Él poder hablar y revelar TODA Su Palabra a Su amada Novia.

Él hizo que fuera grabado, almacenado y preservado, para que la Novia tuviera Su Alimento espiritual, Maná escondido, a la mano cada minuto de cada día hasta el fin del tiempo.

Nuestro ser interior se llena de tal unción cuando oímos la Voz de Dios revelarnos Su Palabra. Cómo Él desenvuelve Su Palabra para que podamos ver claramente y entender Su significado. Está revelando la propia hora en la que estamos viviendo, nos dice quiénes somos y lo que va a suceder muy pronto; nuestro Rapto que viene pronto.

El aún está revelándole a Su Novia lo que sucederá aquí en la tierra mientras estamos con Él en la Cena de las Bodas. Cómo Él abrirá los ojos cegados de Su pueblo escogido; los que Él cegó por causa de Su Novia Gentil.

Amigos, yo sé que estamos cansados de este mundo y anhelamos Su venida para llevarnos lejos, pero también regocijémonos y seamos agradecidos por lo que está sucediendo ahora mismo ante nuestros propios ojos.

Levantemos nuestras manos, nuestros corazones, nuestras voces y alegrémonos. No solo esperemos lo que Él va a hacer por nosotros muy pronto, sino gocémonos por lo que Él está revelando y haciendo por nosotros AHORA MISMO.

Él nos está diciendo que somos Su Novia predestinada uniéndonos con Él y con Su Palabra. Él nos está asegurando una y otra vez, que estamos en Su Voluntad perfecta al permanecer con Su Voz, Su Palabra, Su ángel. Él nos ha dado FE para saber y reconocer quienes somos:

SU PALABRA VIVA EN CARNE.

No tenemos nada que temer; nada de qué preocuparnos; nada por lo que estar tristes. ¿Cómo lo sé? ¡DIOS LO DIJO! ASI QUE REGOCIJEMONOS, SEAMOS FELICES, SEAMOS AGRADECIDOS; LA PALABRA VIVIENTE VIVE Y MORA DENTRO DE NOSOTROS. SOMOS SU SÚPER SIMIENTE REAL.

Creo sinceramente que el Señor también debe estar emocionado al saber que ha llegado el momento y que nos hemos preparado al mantenernos fieles a Su Palabra.

Como el niño que se miró en el espejo por primera vez, estamos mirando en Su Palabra, viendo quienes SOMOS. Señor... SOY YO. Yo soy Tu Palabra Novia viviente. Soy la que TÚ escogiste. Estoy en Ti, Tu estas en mí, somos Uno.

¿Cómo pudiéramos no celebrar y ser el pueblo más feliz que jamás haya vivido sobre la faz de la tierra? Todos los santos y profetas antes de nosotros quisieron vivir en este día y ver estas promesas llegar a suceder. Pero por la GRACIA de Dios, Él NOS colocó aquí.

No podemos esperar:

¡Oh, hermano! ¡Fiu! En otras palabras, cuando el enemigo haya sido encarcelado, habrá llegado el fin del pecado, el traer la justicia perdurable habrá llegado; Satanás es sellado en el abismo, y el conocimiento de Jehová cubrirá la tierra, como las aguas cubren el mar. ¡Amén! ¡Gloria a Dios! ¡Eso viene, hermano, viene!

La unción que se llevará a cabo este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), cuando nos reunamos de alrededor del mundo para escuchar al ángel de Dios, la Voz de Dios para la Novia, traernos el Mensaje: El Propósito Séxtuple De La Visita De Gabriel A Daniel (61-0730E).

El Hermano Joseph Branham

 

 

sábado, 1 de febrero de 2025

Amados con Propósito:

Que maravilloso invierno estamos teniendo al estudiar las Siete Edades de la Iglesia, y luego Dios revelándonos aún más en el Libro de la Revelación de Jesucristo. Cómo los primeros tres capítulos de Apocalipsis fueron las Edades de la Iglesia, y luego cómo Juan fue arrebatado en los capítulos 4 y 5 mostrándonos las cosas que estaban por venir.

En el capítulo 6, Él reveló cuando Juan descendió a la tierra de nuevo para ver las cosas que sucederían desde el capítulo 6 hasta el capítulo 19 de Apocalipsis.

Cuán bendecida será la Novia este domingo cuando oigamos la Voz de Dios hablar a través de Su poderoso séptimo ángel y nos diga lo que va a ser revelado a continuación.

Estoy tan emocionado de anunciar que ahora comenzaremos el gran estudio de Las Setenta Semanas de Daniel. El profeta dijo que esto encaja con el resto del Mensaje antes de que podamos continuar con los Siete Sellos, las Siete Trompetas, los Tres Ayes, la mujer en el sol, el dragón escarlata que es lanzado fuera, los ciento cuarenta y cuatro mil sellados, todo sucede dentro de este tiempo.

El Libro de Daniel es el calendario exacto para la edad y el tiempo en que estamos viviendo, y no importa lo complicado que pueda parecer, Dios lo desglosará y lo hará sencillo para nosotros.

Y Dios sabe que eso es lo que ahora estoy buscando, para que yo pueda consolar a Su pueblo y decirles lo que está a la mano, tanto aquí en esta mañana como por los territorios a donde estas cintas llegarán mundialmente: de que estamos en el tiempo del fin.

Somos el pueblo elegido de Dios que anhela y ora por ese día y esa hora. Y nuestros ojos están puestos en el Cielo, y estamos velando por Su Venida.

Seamos todos como Daniel y levantemos nuestros rostros hacia el Cielo, en oración y súplicas, ya que sabemos por la lectura de la Palabra y al escuchar Su Voz, que la venida del Señor se acerca rápidamente; estamos en el fin.

Ayúdanos Padre a despojarnos de todo peso, de todo pecado, de toda pequeña incredulidad que tan fácilmente nos asedia. Vamos ahora hacia la meta del supremo llamamiento, sabiendo que nuestro tiempo es limitado.

El Mensaje ha salido. Todo está listo ahora, estamos esperando y descansando. La Iglesia está sellada. El inicuo está cometiendo más iniquidad. Las iglesias están llegando a ser más formalistas, pero Tus santos se están acercando más a Ti.

Tenemos una Voz clamando del desierto, llamando al pueblo de regreso al Mensaje original, de regreso a las cosas de Dios. Nosotros entendemos por Revelación que estas cosas están aconteciendo.

Acompáñenos este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), mientras Dios nos revela Su Palabra, mientras comenzamos nuestro gran estudio del Libro de Daniel.

El Hermano Joseph Branham

Las Instrucciones De Gabriel A Daniel (61-0730m)

 

 

sábado, 25 de enero de 2025

Amados en reposo:

En verdad es este el mejor invierno de nuestras vidas. La venida del Señor está a la mano. Hemos sido sellados por el Espíritu Santo; el sello de aprobación de Dios que nos concede todo por lo que Cristo murió.

Ahora poseemos las arras de nuestra herencia, el Espíritu Santo. Es la seguridad, el pago inicial, de que hemos sido recibidos en Cristo. Estamos descansando en las promesas de Dios, reposando en el calor de Su Sol; Su Palabra vindicada, escuchando Su Voz.

Son las arras de nuestra salvación. No nos preocupa si vamos a llegar Allá o no, ¡VAMOS A LLEGAR! ¿Cómo lo sabemos? ¡Dios lo dijo! Dios lo prometió y tenemos las arras. Ya lo hemos recibido y Cristo nos ha aceptado.

No hay forma de escapar de Aquello…de hecho, ¡estamos allí! Lo único que debemos hacer es esperar; Él está llevando a cabo la obra de Pariente Redentor ahora mismo. Nosotros tenemos las arras de eso ahora mismo. Solo estamos esperando el momento cuando Él regrese por nosotros. Entonces, en un instante, en un abrir y cerrar de ojos, nos marcharemos todos hacia la Cena de las Bodas.

Tan solo imaginar todo lo que nos espera. Nuestra mente no puede asimilarlo todo. Día tras día, Él está revelando más de Su Palabra, confirmando que estas grandes promesas nos pertenecen.

El mundo se está derrumbando; incendios, terremotos y caos por todas partes, pero ellos creen que tienen un nuevo salvador que salvará al mundo y traerá su edad dorada. Nosotros ya recibimos a nuestro Salvador y hemos estado viviendo en nuestra Edad Dorada.

Ahora Él nos está preparando aun para más Revelación, al profundizar en al capítulo 5 del Apocalipsis. Aquí Él está creando la escena para la apertura de los Siete Sellos. Tal como lo hizo en el primer capítulo de Apocalipsis, al abrir el camino para las Siete Edades de la Iglesia.

¿Cómo será el resto del invierno para la Novia? Veamos un pequeño avance:

Ahora, no me queda tiempo. Lo tengo escrito, un contexto de eso aquí, pero en nuestra próxima reunión antes de poder entrar en esto… Tal vez cuando venga de mis vacaciones o en algún otro momento, quiero abordar estas setenta semanas de Daniel y conectarlas aquí, y mostrar dónde lo lleva al Jubileo Pentecostal, y lo trae de nuevo con esas siete plag-… esos siete sellos para abrirse aquí antes de irnos, y mostrar que es al final, estas…

¡Qué momento tan maravilloso tiene el Señor reservado para Su Novia! Revelándose Él Mismo en Su Palabra como nunca antes. Demostrándonos que somos Sus elegidos, por quienes Él viene. Diciéndonos que estamos en Su voluntad perfecta al permanecer con Su Voz y Su Palabra.

¿Qué estamos haciendo? Ni una sola cosa, ¡solo Descansando! ¡Esperando! Sin más labor, sin más confusión, ¡ESTAMOS DESCANSANDO EN ESO!

Acompáñenos en el descanso este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), mientras escuchamos la Voz de Dios VINDICADA impartirnos el Mensaje:

Apocalipsis, Capítulo Cinco, Parte II (61-0618).

El Hermano Joseph Branham

 

 

sábado, 18 de enero de 2025

Amados Adoptados:

¡Qué maravilloso invierno estamos viviendo mientras el Espíritu Santo esta iluminando Su Palabra a la Novia como nunca antes! Cosas que quizás hemos escuchado, leído y estudiado toda nuestra vida, ahora están siendo develadas y reveladas como nunca.

El hombre ha esperado este día durante miles de años. Todos anhelaban y oraban por oír y ver las cosas que nosotros vemos y oímos. Aun los profetas de antaño anhelaban este día. ¡Cuánto deseaban ver el cumplimiento y la venida del Señor!

También los discípulos de Jesús, Pedro, Santiago y Juan, hombres que caminaron y hablaron con Él, anhelaban ver y oír todo lo que estaba escondido. Oraron para que fuera revelado y manifestado en sus días, en su tiempo.

A lo largo de las Siete Edades de la Iglesia, cada mensajero, Pablo, Martín y Lutero, quisieron conocer todos los misterios que estaban escondidos. Su deseo era ver el cumplimiento de la Palabra durante su vida. Querían ver la venida del Señor.

Dios tenía un plan. Dios tenía un tiempo. Dios tenía un pueblo por el cual Él esperaba... NOSOTROS. A través de las edades, todos habían fallado. Pero Él sabía, por Su previo conocimiento, que llegaría un pueblo: Su gloriosa, Novia Palabra perfecta. ELLOS NO LE FALLARÍAN. Ellos no cederían en UN A SOLA PALABRA. Ellos serían Su Novia Palabra pura y virgen.

Ahora es el tiempo. Ahora es la sazón. Somos los escogidos que Él ha esperado desde que Adán cayó y entregó su derecho. NOSOTROS SOMOS SU NOVIA.

Dios le mostró a Juan una vista anticipada de todo lo que sucedería, pero él no conocía todos los significados. Cuando él fue llamado, vio en la mano derecha del que estaba sentado en el trono un libro escrito, sellado con siete sellos, pero no había nadie digno de abrir el libro.

Juan gritó y lloró amargamente pues todo estaba perdido, no había esperanza. Pero alabado sea el Señor, uno de los ancianos le dijo: “No llores, porque he aquí que el León de la tribu de Judá, la Raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos”.

Ese era el tiempo. Esa era la sazón. Ese era el hombre que Dios había escogido para escribir todo lo que él vio. Pero, aun así, todo Su significado era desconocido.

Dios estaba esperando y esperando que Su vaso escogido, Su séptimo ángel mensajero, viniera a la tierra; así Él podría usar su voz para ser Su Voz, para Su Novia. Él quería hablar de labios a oídos para que NO HUBIERA MALENTENDIDOS. Él mismo, quería hablar y revelar todos Sus misterios a Su Novia amada, predestinada, perfecta y dulce: ¡¡NOSOTROS!!

¡Cuánto ha anhelado Él decirnos todas estas maravillas! Así como un hombre le dice a su esposa que la ama una y otra vez, y ella nunca se cansa de oírlo; a Él le encanta decirnos una y otra vez que nos ama, nos eligió, nos esperó y ahora viene por nosotros.

Él sabía que nos encantaría escucharlo decir Aquello una y otra vez, así que grabó Su Voz, para que Su Novia pudiera “Presionar Play” todo el día, todos los días y escuchar Su Palabra llenar sus corazones.

Su Novia encantadora Se ha preparado alimentándose de Su Palabra. No escucharemos nada más, solo Su Voz. Solo podemos alimentarnos de Su Palabra Pura que ha sido provista.

Estamos bajo gran expectativa. Lo sentimos por dentro, en nuestras almas. Ya viene. Oímos sonar la música de bodas. La Novia se prepara para caminar por el pasillo. Todos de pie, la Novia viene a reunirse con su Novio. Todo está preparado. Ha llegado el momento.

Él nos ama como a nadie más. Nosotros Le amamos como a nadie más. Vamos a ser Uno con Él y con todos los que amamos, por toda la eternidad.

Usted está invitado a venir a prepararse para la boda con nosotros este domingo a las 12:00 p.m. (hora de Jeffersonville), mientras escuchamos la Voz de Dios revelar Apocalipsis Capítulo Cinco, Parte I (61-0611).

El Hermano Joseph Branham